Guayaquil es una de las ciudades más pobladas y visitadas de Ecuador. A pesar de que en la actualidad la urbe enfrenta una crisis de inseguridad severa, este no es el único factor que afecta la imagen de la Perla del Pacífico, puesto que la basura también juega un rol.
Caminar por la calle significa ver basura y desperdicios en cada esquina, sobre todo en el centro de la ciudad, principal punto turístico. Las alcantarillas se han vuelto basureros, impidiendo que el agua pueda drenar, convirtiendo a las vías de la urbe en piscinas en época de lluvia.
La ciudadanía debería poner de su parte y evitar botar desperdicios en las calles que generan que la ciudad se convierta en un basurero. Por ejemplo, hoy, dirigiéndome a mi casa, pude observar como una persona desde el bus lanzó un papel a la calle, ¿era realmente necesario?, ¿no podía esperar a tener un basurero cerca para tirarlo?
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Locales de la avenida Víctor Emilio Estrada han sido notificados por mala disposición de basura
Las autoridades respectivas deberían ver lo grave que es este problema y no dejarlo pasar por alto. No podemos seguir permitiendo que una ciudad tan llamativa como Guayaquil muestre esa mala imagen. Hago un llamado a la ciudadanía, de tomar conciencia y guardar nuestros desperdicios hasta encontrar un tacho de basura y botarlo. Cuidemos nuestra ciudad y su imagen. (O)
Natalia Dennis Gómez Haz, periodista, Guayaquil
