El término de big data en Medicina se define como la capacidad de examinar, procesar y contribuir a la información de los datos estructurados y no estructurados de los pacientes con base en un sistema informático que integra la parte clínica, epidemiológica e inclusive estudios genómicos y moleculares en respuesta a diferentes fármacos.
Este tipo de estudio cambiará la atención asistencial como la relación médico-paciente, ya que la información estará coordinada a tiempo real con la base de datos de las historias clínicas, pruebas de laboratorios, registros médicos, las notas manuscritas de médicos y enfermeras, las grabaciones de voz, las radiografías, escáneres, resonancias magnéticas, TAC y otras imágenes médicas.
A estos datos pertenecientes a ambas categorías también se pueden considerar los archivos electrónicos de contabilidad y gestión administrativa, etc., conectados a un computador que generará respuestas individualizadas del paciente tanto en su diagnóstico como en lo terapéutico.
Algunos autores lo definen como el Nostradamus del siglo XXI, por su capacidad predictiva; un ejemplo es la identificación de tipo de cáncer con el Oncobytes, que es un procedimiento sofisticado que permite localizar tumores en sus fases tempranas, reducir los falsos positivos, lo que mejoraría la eficiencia del tratamiento.
El big data nos permite entrelazar una serie de datos de todo tipo de información e inclusive percibe la calidad de vida que, en patologías degenerativas u obstructivas como el Alzheimer, neoplasias, enfermedades vasculares, buscan integrar los datos para encontrar respuestas más sensibles a los tratamientos en coordinación con la industria farmacéutica.
Esta base de datos a nivel mundial se dio con el analgésico Vioxx, tras un análisis de más de un millón de pacientes que tomaban ese fármaco, se pudo encontrar su efecto nocivo cardiovascular, lo que hizo que se retirara del mercado a nivel mundial.
El big data permite conocer el estado de salud personalizado en tiempo real, garantiza su atención en cualquier parte donde se encuentre. Por este motivo, se sugiere que todo el sector salud implemente esta tecnología, que maneja grandes volúmenes de información a una alta velocidad de respuesta, utilizando una historia clínica unificada electrónica que permite la operatividad de los sistemas informáticos hospitalarios. Con esta tecnología se pueden hacer análisis predictivos, conocer los riesgos de las poblaciones en peligro, que es el trabajo de promoción y prevención epidemiológico.
Este tipo de predicción se logra combinando el big data con el machine learning; el sistema informático recopila grandes volúmenes de información, en tiempo real puede predecir dónde habrá más mujeres con cáncer de mama o en qué época del año se elevará el índice de mortalidad materno infantil.
Es importante que todo el sector de salud público y privado tenga un tipo de historia clínica unificada que permita ser monitorizada, procesada, cribada a través del big data, lo que será aprovechado por el profesional sanitario y también en la formación de los futuros médicos, enfermeros y personal de la salud a nivel nacional.
“La tecnología nos facilita reducir las barreras de la distancia y el tiempo”, Emily Greene Balch. (O)