La imagen del Divino Niño tiene una importancia especial para los feligreses de la Iglesia Católica, y es que su presencia en el hogar simboliza esperanza, humildad y la creencia de que existen los milagros divinos. Su devoción se ha expandido por cada rincón del planeta y es por ello que la oración en su nombre es un faro de luz para quienes pasan por un momento difícil.