Podría decirse que es el centro de atención de algunos deportes, pero en el fútbol es la culpable del frenético grito “¡gooooool!”. Las pelotas utilizadas en el evento estrella de la FIFA y del deporte más jugado en el mundo ha sufrido serias transformaciones a través del tiempo, adaptándose incluso a las exigencias que impone la tecnología disponible.