Las enfermedades y las infecciones renales pueden manifestarse de diferentes formas en el cuerpo. Uno de los síntomas más recurrentes es el dolor en la espalda baja, acompañado de debilidad o náuseas. Sin embargo, la orina es la primera en mostrar si alguien debe preocuparse por la salud de sus riñones.

Por esta razón, es vital someterse a análisis al menos una vez al año para detectar a tiempo si una anomalía en la orina es causada por un daño en estos órganos tan importantes para filtrar las impurezas de la sangre.

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Señales de enfermedad renal en la orina

La orina es la que presenta las primeras señales de daño o enfermedad renal. Foto: Pixabay

Orina espumosa

Si los riñones están dañados, la proteína puede filtrarse y provocar la formación de burbujas en la orina, según la National Kidney Foundation.

Cambios del color

Algunos medicamentos o alimentos causan cambios en el color de la orina; sin embargo, cuando esta es de color rojo o marrón oscuro, es necesario acudir a un especialista. Esto puede significar la presencia de sangre, la cual se produce cuando hay algún daño en las vías urinarias o en los filtros de los riñones.

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Cambios en el olor

Otro cambio a tener en cuenta es el olor de la orina. Aunque no es exclusivo de la enfermedad renal, un olor inusual puede ser una señal de que algo anda mal.

La forma más precisa de diagnosticar cualquier problema es a través de una prueba de orina. Foto: Freepik

Si bien estos cambios en la orina pueden indicar daños en los riñones, en algunos casos son causados por afecciones menos graves. Por lo tanto, la forma más precisa de diagnosticar cualquier problema es a través de una prueba.

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Esta consta de varios pasos. En primer lugar, se realiza un examen visual para notar anomalías como color oscuro o espuma. Luego, se utiliza un microscopio para identificar cualquier elemento extraño como los cálculos y, por último, se realiza un análisis con tira reactiva para buscar signos de diabetes, infecciones o enfermedades renales.

(I)

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