La chía es una semilla rica en ácidos grasos tanto que en Cuerpo Mente la describen como la estrella del omega-3 vegetal. Además es una buena fuente de minerales como el calcio, el magnesio y el boro. Tiene, igualmente, “un alto contenido de fibra, tanto soluble como insoluble, lo que nos ayuda a mantenernos saciados y a regular el tránsito intestinal”. Aún así, hay ciertas restricciones para su consumo. No todas las personas pueden comer chía.