La infusión de manzanilla “es apta”, por si lo duda, durante el embarazo siempre y cuando su consumo se produzca de manera esporádica, informan en La Vanguardia.
En el sitio web Alimente enfatizan que “la clave está en no beber manzanilla durante el primer trimestre de la gestación”.
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Si estás embarazada, consulta con tu médico y con él toma la mejor decisión. Debes saber que, como indican en Nace Igenomix, “algunas de las propiedades de la manzanilla sugieren que es buena para el embarazo, especialmente durante el segundo trimestre”.
¿Qué efectos tiene la manzanilla en el embarazo?
Serían al menos 5 los beneficios para las embarazadas:
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1. Es un calmante. La acción calmante de la manzanilla en el embarazo puede ayudar a reducir dolores y molestias, especialmente a partir del segundo trimestre, reiteran en Nace Igenomix.
2. Con la infusión de manzanilla se puede combatir las náuseas y la acidez estomacal que muchas mujeres tienen durante esos meses.
3. La infusión de manzanilla ayuda a conciliar el sueño.
4. Ayuda a prevenir infecciones en las vías urinarias: “La ingesta de líquidos ayuda a orinar con mayor frecuencia y a evitar este tipo de infecciones incómodas y hasta peligrosas en el embarazo”.
5. El “efecto laxante” de la manzanilla es mínimo, pero puede ayudar para prevenir este problema tan típico del embarazo consecuencia de los cambios hormonales y en el cuerpo de la mujer.
Cómo consumir la infusión de manzanilla
Invitan a distinguir entre la manzanilla “normal” y el té de manzanilla. “El segundo está contraindicado en embarazadas, sobre todo si tiene menos de 15 gr. de manzanilla o si la mujer está en el primer trimestre de la gestación”.
De acuerdo con Nace Igenomix, si buscas relajación con la manzanilla, “no se recomienda beber más de una taza al día”. (I)
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