La industria de la autoayuda está en auge. Viene tomando impulso desde hace años por la psicología positiva, el estudio científico de aquello que hace prosperar a las personas. Sin embargo, al mismo tiempo crecen las tasas de ansiedad, depresión y autolesiones en todo el mundo. ¿Será que estamos condenados a ser infelices, a pesar de estos avances en psicología?