Las manchas blancas en la piel no suelen ser motivos para preocuparse. Según los dermatólogos, estas aparecen cuando las proteínas o algunas células muertas quedan atrapadas debajo de la superficie, además de algunas patologías leves que las producen, como la dermatitis atópica o la candidiasis superficial, tal como lo refiere la Clínica Mayo.