Llevar una alimentación balanceada es ideal para tener una buena salud. Algunos alimentos tardan mucho en ser digeridos. Además, pueden provocar otros problemas como gases, estreñimiento o dolor abdominal.

Es importante tener en cuenta los alimentos que se ingieren, pues estos pueden ser beneficiosos o perjudiciales para el organismo.

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Hay alimentos que son muy deliciosos e irresistibles, pero a la vez resultan pesados para el estómago pues demoran mucho en digerirse y causan otros problemas como: gases, dolor abdominal, pesadez, reflujo, ardor y/o malnutrición, entre otros.

Los alimentos más difíciles de digerir

Frituras

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Sobre todo si se usan aceites recalentados, viejos, estropeados o de mala calidad.

Las frituras y los alimentos fritos con aceites recalentados pueden ser fuente de grasas trans en la dieta.

Harinas y productos de repostería

Todos los productos elaborados con mezcla de harinas, mantequilla y leche, como croquetas, rellenos o bases de repostería.

Lácteos

Si el consumir este tipo de alimentos provoca indigestión, así como diarrea, cólicos, náuseas o gases, es muy probable que seas intolerante a la lactosa, según apunta la página de Runner’s Digest. Esto ocurre cuando el intestino delgado no produce suficiente lactasa para absorber un tipo de azúcar que se encuentra en los lácteos.

Huevo duro

La yema (la parte que concentra las grasas, es decir, los componentes más indigestos) está coagulada. Cuajada es más difícil de digerir.

Alcohol

El alcohol relaja el esfínter del esófago, haciéndolo susceptible a la gastritis o al reflujo. Además, puede inflamar el estómago, impedir que se absorban nutrientes, y bloquear ciertas enzimas.

El tiempo que tarda la digestión depende mucho del tipo de los alimentos que ingerimos y de cada persona.

Después de comer, los alimentos tardan aproximadamente entre seis a ocho horas en pasar por el estómago y el intestino delgado. Luego ingresan al intestino grueso (colon) para una digestión posterior, la absorción de agua y, finalmente, la eliminación de los alimentos no digeridos. (I)