Secarse después del baño con una toalla sucia puede afectar tu salud. Qué responderías a la pregunta: ¿sabías que tu toalla puede tener hasta bacterias fecales?
La dura interrogante la formula Susana Álvarez, asesora de bienestar y salud.
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A través de sus redes sociales advierte que en la toalla crecen muchas bacterias y dice cada cuánto tiempo debes cambiarla.
Sostiene Álvarez que tu toalla, después de tres usos, puede acumular miles de microorganismos, como la Escherichia coli (E. coli) y la Staphylococcus aureus.
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Pero dice más: Incluso si parece limpia, en tu toalla pueden estar esas bacterias.
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La especialista indica que esas bacterias pueden provocar infecciones en tu piel, irritaciones y otros problemas de salud
La Clínica Mayo informa que, por lo general, la bacteria Escherichia coli (E. coli) vive en los intestinos de las personas y de los animales sanos.
La Staphylococcus aureus, a menudo denominados “estafilococos”, son bacterias que comúnmente tienen las personas sanas en la piel o la nariz. Con frecuencia, los estafilococos ocasionan infecciones de la piel, como forúnculos, explican los CDC - Centros para el Control y Prevención de Enfermedades- de Estados Unidos.
Cada cuánto tiempo debes cambiar la toalla de baño
Para Cuídate Plus, el dermatólogo Román Barabash Neila informa que “hongos, ácaros y bacterias pueden sobrecrecer en toallas que no son lavadas con la frecuencia que deberían o que no se dejan secar o airear adecuadamente”.
“Cuanto más tiempo pase la toalla sin lavarse, más riesgo hay de que acumule gérmenes”, dice.
“Cambia tu toalla de baño cada tres días o después de tres usos”, afirma Susana Álvarez.
“El consenso y el sentido común dicen que lavar una toalla cada 3-4 días es lo adecuado”, coinciden prácticamente en Cuídate Plus.
Es mejor cambiar la toalla cada tres días para evitar irritar la piel o provocar infecciones.
Shreya Andric, dermatóloga en New York Post
Álvarez plantea a sus seguidores de redes que deben asegurarse de que la toalla se seque muy bien después de usarla.
Recuerda que la humedad favorece el crecimiento bacterial.
Aconseja lavar las toallas con agua caliente y pide que nunca la compartas. (I)
