El SARS-CoV-2 es motivo de desvelo en el mundo desde su aparición allá por noviembre de 2019; poco después se desencadenó la crisis sanitaria por COVID-19. Luego de dos años de la detección del virus, los profesionales y la población en general se preguntan: ¿Cuándo acabará la pandemia?
A fines de noviembre hizo su aparición la variante ómicron que se expandió por el mundo con mayor rapidez aún que su predecesora delta.
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A estas preguntas acercó algunas respuestas el médico español Miguel Marcos, profesor titular en el Hospital Universitario de la Universidad de Salamanca. El doctor Marcos adelantó que, en su opinión “estamos probablemente en la transición de la pandemia a la endemia”.
Él define a la endemia como la presencia decreciente de números o casos estables al año. Marcos afirmó que “estamos mucho mejor que el año pasado porque el riesgo individual en los vacunados de tener COVID-19 grave o fallecer por esta enfermedad es mucho menor”. Sin embargo, recalca que la mejor opción es vacunarse.
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Una de las preocupaciones de Marcos en relación a la variante ómicron es la posibilidad de que los sistemas de salud vuelvan a recaer, ya que si bien, la cepa es menos grave, sí podría darse un colapso de los sistemas de salud.
¿Qué puede ocurrir en cuanto al aumento de las infecciones y los casos graves?. “Depende de muchos factores”, manifestó. “Estos factores serán la inmunidad que tengamos, natural y adquirida, y cómo se mantenga en el tiempo”, ya que hasta hoy “no sabemos cómo tendremos la inmunidad al SARS-CoV-2 dentro de un año” y también de “la capacidad del virus de mutar y que aparezcan variantes (nuevas), además de la situación de cada persona” respecto de su sistema inmune.
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“Tampoco podemos saber si ciertos grupos tendrán que vacunarse anualmente. Personalmente, veo improbable que haya que vacunar cada año a todos a largo plazo, pero que nos pueda tocar otra dosis o que ciertos grupos sí tengan que vacunarse anualmente parece más probable”, explicó, lo que sería un reflejo de lo que ocurre actualmente, por ejemplo, con la gripe.
Por otra parte, Marcos consideró que erradicar el SARS-CoV-2 es “muy difícil” podría ocurrir “como el sarampión” que implicaría la escalada eventual de los casos, pero una mejora en la inmunidad general. (I)
