La administración de insulina, una alimentación rica en fibra y proteínas, así como la práctica regular de ejercicio físico, son los tratamientos fundamentales para que un paciente diabético pueda controlar los niveles de azúcar en la sangre y tener una vida plena.
Tanto la diabetes tipo 1, en la que no se produce nada de insulina, y la tipo 2, aquella que no produce y no utililiza adecuadamente la insulina, pueden tener consecuencias graves para la salud si no son tratadas adecuadamente.
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Así lo afirma también la Asociación Americana de Diabetes, la cual señala que esta condición fue la octava causa del total de muertes registradas en 2021 en Estados Unidos.
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¿Cómo se puede morir a causa de una diabetes no tratada?
De acuerdo con Health, el aumento de los índices de glucosa en la sangre tienen efectos negativos e incluso mortales a largo plazo, especialmente cuando la persona no es tratada. Estos problemas son:
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Problemas cardiovasculares
Los niveles altos de azúcar dañan a largo plazo los vasos sanguíneos y el corazón, lo que aumenta la probabilidad de desarrollar y morir a causa de una enfermedad cardiovascular.
Cetoacidosis diabética
Otra de las condiciones que se puede desarrollar es la cetoacidosis diabética, la cual es el aumento de los niveles de cetona en el cuerpo. Esta sustancia química tóxica se produce en exceso cuando el cuerpo utiliza la grasa como fuente de energía.
Esto se causa principalmente cuando no se recibe la dosis diaria de insulina y el cuerpo deja de aprovechar el azúcar de la sangre, además, puede ser mortal.
Problemas renales
La diabetes no controlada a largo plazo puede dañar los vasos sanguíneos de los riñones, lo que aumenta el riesgo de desarrollar enfermedad renal crónica.
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A medida que la enfermedad renal avanza, puede ser necesario recurrir a diálisis o trasplante renal en casos más graves. Sin tratamiento, la insuficiencia renal puede ser mortal.
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