El placer de disfrutar de un plato de comida chatarra es innegable, pero detrás de esta elección se esconden serias implicaciones para la salud física y mental.

La comida chatarra no te hace tan feliz como pensabas: Esto es lo que ocurre entre el colon y el cerebro cuando comes grasas y azúcares

Los alimentos ultraprocesados constituyen una categoría de productos que fueron transformados en la industria alimentaria y contienen ingredientes que rara vez se encuentran en la cocina tradicional.

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La comida chatarra proporciona placer de forma momentánea. Foto: Freepik

Su composición, repleta de azúcares, grasas saturadas y aditivos, repercute de forma negativa en el funcionamiento del cerebro.

¿Cómo afectan los alimentos procesados al cerebro?

La psiquiatra nutricional Uma Naidoo, profesora en Harvard, investigó el impacto de la comida ultraprocesada en el comportamiento y bienestar, señala el sitio web Cronista.

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Su estudio revela que la atracción hacia estos productos se debe en gran medida a su capacidad de estimular intensamente el cerebro.

Al consumir alimentos ricos en azúcares o bebidas azucaradas, el cerebro libera dopamina, un neurotransmisor que produce sensaciones de placer y satisfacción, explica la especialista.

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Este proceso establece un ciclo de recompensa que hace que se desee repetir la experiencia, incluso si a largo plazo esto puede llevar a consecuencias adversas a la salud.

El consumo regular de alimentos ultraprocesados no solo afecta el placer inmediato, también puede desencadenar una serie de problemas a nivel físico y mental.

Naidoo advierte que estos productos pueden alterar el microbioma intestinal, lo que a su vez impacta el estado de ánimo y bienestar emocional. Su consumo también se asocia con inflamación y un aumento de la ansiedad.

Las comidas procesadas dañan alteral el cerebro. Imagen: Pixabay

A pesar de todo, hay una luz al final del túnel y la experta menciona que es posible contrarrestar los antojos por estos alimentos mediante prácticas más saludables.

Por ejemplo, aumentar la ingesta de alimentos ricos en fibra puede generar una sensación de saciedad más duradera, lo que ayuda a reducir el deseo por los ultraprocesados.

Además, es importante mantener una adecuada hidratación, ya que a menudo el cuerpo puede confundir la sed con hambre y lleva a más de uno a consumir innecesariamente estos productos.

(I)

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