Una amiga tiene 42 años de edad, viene de una familia humilde, estuvo casada con un extranjero, con lo que mejoró su situación económica, pero la relación terminó y ella se quedó sin casa, carro y negocio. Ahora vive en la casa de los padres, es madre soltera, no tiene pareja estable, y cree que todos tienen que hacer lo que ella diga. Se cree dueña de la casa, y dice que para salir de allí, tienen que pagarle todos los arreglos que hizo para poder vivir con su hijo.