Los mercados de carbono (figura creada en 1997 en el Protocolo de Kioto) son considerados como parte de la solución al cambio climático. En su mayoría son gestionados por el sector privado, pero esto cambiaría pronto, revela un reciente informe publicado por el Banco Mundial. Chile, Ghana, Jordania, Singapur y Vanuatu ya están desarrollando infraestructura para respaldar su participación en los mercados internacionales donde se pueden vender y comprar bonos de carbono (mecanismo internacional para reducir emisiones contaminantes) y así obtener financiamiento verde.