Un estudio del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) afirma que en ciudades como Guayaquil, en Ecuador, la expansión urbana horizontal y las invasiones provocan problemas muy graves como la deforestación y que esto contribuye a exacerbar los impactos previstos del cambio climático como las inundaciones, escorrentía, riesgo de erosión y deslizamiento de tierras.