El corte de cabello, el color e incluso el peinado influyen en la imagen que proyectamos y si nos vemos más o menos jóvenes. Por ello, a partir de los 40 o 50 (dependiendo de la genética de cada persona) debemos optar por estilos que nos ayuden a restar años y no siempre dejarnos llevar por las tendencias del momento, señala una publicación del sitio web ABC.