Se denomina hemorroides a la inflamación de venas alrededor del ano. Es causada por sentarse demasiado tiempo en el baño, hacer esfuerzo en las deposiciones, tener estreñimiento, consumir dieta baja en fibra, levantar frecuentemente objetos pesados. Incluso pueden producirse por embarazo y envejecimiento.
Los síntomas se diferencian según el tipo de hemorroides: internas o externas. En el caso de las primeras, habrá sangrado del recto, que se verá reflejado en las heces, el papel higiénico o la taza del inodoro. Habrá dolor si está prolapsada. En el caso de las segundas, tendrá picazón anal y dolor anal cuando se siente. Además, podría percibir uno o dos bultos duros y sensibles cerca del ano, según indica en una publicación la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
La entidad hace ocho recomendaciones para tratar hemorroides:
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Esta institución médica recomienda que se busque atención médica cuando se mantienen los síntomas después de una semana de tratamientos caseros o si hay hemorragia rectal. Con exámenes se determinará si se trata de hemorroides o alguna otra enfermedad, como colitis ulcerativa, o algún tipo de cáncer.
"Hay varios procedimientos diferentes que su profesional de la salud puede hacer en la consulta. Estos procedimientos usan diferentes técnicas para causar la formación de tejido cicatricial en las hemorroides, lo que corta el suministro de sangre, generalmente reduciendo las hemorroides. En casos severos, puede necesitar cirugía", se advierte en la publicación. (I)
