Los sonidos con los que se despierta una persona podrían estar afectando a cómo de activa se levanta. Así lo sugiere un estudio de la Universidad RMIT de Melbourne (Australia), que ha concluido que las alarmas de carácter más melódico, como una canción, podrían mejorar los niveles de alerta, mientras los tonos de alarma con sonidos repetitivos están relacionados con el aumento de los niveles de aturdimiento.