Richard Carapaz dio lustre a su brillante palmarés con una victoria de mérito, una etapa en la única grande donde todavía no había mojado. El ecuatoriano había subido a la tercera plaza del podio en 2021, había vestido el maillot amarillo en la presente edición, pero le faltaba alzar los brazos en alguna meta, algo a lo que renunció en 2020 cuando entró de la mano de Michal Kwiatkowski, una fotografía que sí tenía por triplicado en el Giro de Italia, que además conquistó en 2019, y en la Vuelta a España. El sudamericano logró uno de esos triunfos calificados de consolación, donde los gallos de su categoría buscan resarcirse cuando se diluyen sus opciones en la general. Carapaz ya lo ha conseguido. Simon Yates, segundo en la meta de Superdévoluy, y Enric Mas, tercero, todavía están en ello.