La selección española femenina se marcha de París 2024 con la medalla menos deseada, la de ‘chocolate’, con amargura tras perder la oportunidad histórica de entrar en la final y este viernes de caer en la lucha por el bronce ante Alemania víctima de dos penaltis, uno transformado por Gwinn y otro malogrado por Alexia Putellas en la prolongación, y hasta de la mala fortuna cuando en el primer tiempo envió dos balones al larguero.