Jorge Luis Burruchaga marcó un gol electrizante que le dio Argentina el triunfo 3-2 sobre Alemania en la final de la Copa del Mundo de México 1986, luego de recibir una notable habilitación de Diego Maradona quien, con un pase preciso puso a correr al volante en ventaja respecto a su celador germano. El tanto aseguró el segundo campeonato para el fútbol albiceleste.