El resultado del partido entre Villarreal y Real Madrid quedó relegado. Pese a la victoria del pasado sábado del equipo submarino en el Santiago Bernabéu, la atención se centró en el incidente que protagonizaron Federico Valverde y Álex Baena.

Valverde, jugador merengue, golpeó en el parqueadero a Baena, del Villarreal, tras unas palabras que habría dicho en un partido anterior sobre el hijo del uruguayo.

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“Muy triste por la agresión que he sufrido tras el partido y sorprendido por lo que se está diciendo sobre mi persona. Es totalmente falso que yo dijera eso”, escribió en Twitter Baena en la madrugada del domingo.

Imágenes de televisión muestran al jugador subiendo al autobús del Villarreal con el pómulo izquierdo hinchado. Mediante un comunicado, el Villarreal confirmó que Baena presentó una denuncia ante la Policía y cuenta con el respaldo del club.

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“El futbolista del Villarreal CF, Álex Baena, sufrió anoche una agresión mientras se dirigía al autobús del equipo tras el partido disputado ante el Real Madrid CF en el Estadio Santiago Bernabéu. Ante esta situación, el jugador ha decidido interponer la correspondiente denuncia al agresor ante la Policía Nacional”, escribió el club amarillo.

“Una vez más, el Villarreal CF muestra su rechazo a cualquier acto de violencia y cree firmemente en la versión de su jugador, al cual apoyará a lo largo de todo este proceso”, concluyó.

El árbitro Javier Alberola Rojas no incluyó ninguna referencia al incidente en su acta del partido.

El entorno del oriental reveló lo que habría dicho Baena. “Llora ahora que tu hijo no va a nacer”, esto le habría comentado durante el partido de la Copa del Rey.

Durante esa etapa, la familia de Valverde enfrentaba una grave crisis ya que el segundo hijo que esperaban habría estado muerto, según un estudio, sin embargo, casi un mes después se confirmó que estaba en buen estado.

Baena publicó este lunes un comunicado en el que indicó haber sido agredido al culminar el cotejo el sábado pasado por unas declaraciones “en el que se decía que había deseado el dolor de un familiar”.

Dijo que no hay evidencia alguna de esto y que “se aprovechó una desgracia para justificar la agresión y hay mentiras que duelen más que los golpes. El daño que se le está haciendo a mi familia es irreparable e injustificable: amenazas, insultos e incluso mensajes privados deseando la muerte a mi familia”.

De igual manera confirmó la denuncia ante la Policía. Este lunes estaba previsto que se reúna Antiviolencia que podría establecer un informe que pase a la competición española y sea sancionado deportivamente. (D)