El Sevilla conquistó de nuevo la gloria al ganar su séptima Copa de la UEFA Europa League en su final ante el Roma de José Mourinho en la tanda de penaltis (4-1), después de que el partido y la prórroga acabaran con 1-1, y agranda así su leyenda en su torneo fetiche con un último penalti marcado por el argentino Gonzalo Montiel y con suspense, pues, tras fallar primero, tuvo que repetirlo por haberse adelantado el luso Rui Patricio.