Si todo lo que venía rodeando al Chelsea eran puras ‘rarezas’ desde que llegó Todd Boehly (dueño del club), ahora la situación toma un rumbo aún más extraño. Que los blues tienen que vender sí o sí, y de manera masiva este verano, es un hecho… Pero los tres partidos de liga inglesa que restan decidirán si la tesitura económica del club toma un rumbo más complicado o no.
Según la regla de ingresos económicos impuesta por la UEFA, los clubes que disputen competición europea podrán asumir un máximo de $43 millones en pérdidas durante las temporadas 2022-23 y 2023-24 ($ 21 millones por temporada), publica diario AS.
La Premier, por su parte, permite un total de 105 millones de libras, es decir, 131 millones, en pérdidas por cada tres temporadas ($ 43 millones por temporada). Ante este último organismo, el Chelsea ya está ‘amenazado’.
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El cierre del ejercicio económico inglés se producirá el próximo 30 de junio, y los londinenses, de momento y con la situación actual, no superarán las pruebas de FFP (Fair Play Financiero). Están obligados a vender, sí o sí, a jugadores importantes, ya que, según la prensa inglesa, rebasan el límite y por bastante.
Las cifras: pérdidas de £89,8 millones el curso pasado ($ 111 millones), y sin ingresos por la Liga de Campeones esta temporada.
Por ello, si los blues consiguen clasificarse a competición europea, deberán ajustarse también a las reglas financieras de la UEFA, que, en resumidas cuentas, permite aproximadamente la mitad de gasto que la Premier. Si superan, y por bastante, el límite en Inglaterra, en Europa, aún más.
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En la ‘lista negra’ de la UEFA
El Chelsea ya entró en 2022 en una especie de lista de clubes que serían vigilados económicamente para los próximos años. Además, la UEFA aprobó el ‘cierre’ de un vacío legal que aprovechó el Chelsea para cuadrar cuentas gastándose más de 500 millones de euros ($ 539 millones) en un solo mercado: la amortización de los fichajes mediante la larga duración de los contratos.
Esto significa que, por ejemplo, el montante total del fichaje de Moisés Caicedo por 115 millones de libras ($ 143 millones aproximadamente), solo se puede amortizar en cinco años, no en más temporadas, como son los casos de Enzo o Mudryk. (D)
