La luna de miel que vive Dixon Arroyo en el Inter Miami continúa. El mediocentro ecuatoriano volvió a ser de la partida con el cuadro rosa la noche del martes, en la Leagues Cup, y atestiguó la primera titularidad de Lionel Messi y Sergio Busquets desde que aterrizaron en Estados Unidos.
El Inter goleó por 4-0 al Atlanta United y puede soñar en grande en este torneo que reúne durante un mes a los equipos de la MLS (Estados Unidos y Canadá) y la liga mexicana.
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Todo arrancaría como terminó el partido anterior contra Cruz Azul (2-1) en el estadio DRV PNK de Fort Lauderdale: Arroyo, Busquets y Messi juntos, pero esta ocasión más de 35 minutos.
El argentino anotó dos goles y una vez más fue decisivo en la segunda victoria consecutiva del equipo floridano con sus fichajes estrella.
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Arroyo participó en la jugada de la primera conquista del Inter al pivotear la pelota en la mitad de la cancha para Busquets en el minuto 7, y dio el pase para que Messi abriera el camino del segundo gol en el 22.
“Ustedes saben los jugadores que llegaron: marcan mucha diferencia, te dan esa confianza y ese toque que necesitas, y ustedes lo presenciaron; es fácil jugar con ellos. Sabemos que son diferentes y nosotros tenemos que hacer la labor de obrero. Ellos, cuando tienen que mostrar sus virtudes, las muestran. Y el partido lo pudimos ganar de manera abultada”, dijo el ex-Emelec a Apple TV.
Tras un inicio flojo del Inter Miami, con un tiro al palo del Atlanta, el centrocampista español y el astro argentino se echaron el equipo a la espalda. Fue un recuerdo de viejos tiempos.
Messi tiró un desmarque, Busquets levantó la cabeza y le puso una maravilla de pase en profundidad. El argentino tiró al palo con la izquierda y cazó el rechace con la derecha.
En otra gran jugada, la Pulga abrió a la banda izquierda de Robert Taylor, que le devolvió la pelota al centro del área, ahí donde Messi no falla. Segundo gol con la derecha y de nuevo la locura, los gritos y los fuegos artificiales.
Enfrente, el Atlanta, que ganó la MLS en 2018 con Martino en el banquillo, apenas pisaba el campo rival.
Una buena internada de Taylor por la izquierda trajo el tercer gol del Inter Miami, justo antes del descanso, y un contragolpe poco después del intermedio terminó de hundir al Atlanta.
El protagonista fue una vez más Messi, que condujo un contragolpe por el centro del campo, fijó a la defensa y dejó a Taylor solo ante el portero. El extremo no falló.
Con el partido ya en claro declive, Messi recibió una ovación en pie de los casi 20.000 espectadores al abandonar el césped en el minuto 77. En dos partidos con el Inter lleva tres goles y deja muchos motivos para soñar.
El delantero ecuatoriano Leonardo Campana ingresó en el 82 en sustitución del finlandés Taylor y no le alcanzaría el tiempo para tener su primera velada junto con Messi y Busquets, que salieron minutos antes.
Poco después, Thiago Almada falló un penalti para el Atlanta.
(D)