En las últimas tres décadas, Barcelona ha atraído a muchos futbolistas brasileños, el último de ellos el recién llegado Raphael Dias Belloli ‘Raphinha’, gracias al atractivo estilo de juego del FC Barcelona, históricamente ofensivo como el de la selección canarinha, pero también al clima mediterráneo, la presencia del mar en la ciudad y su estimulante vida nocturna.