Pocos han de conocer que Jordi Govea compartió entrenamiento con Cristiano Ronaldo, Pepe, Fábio Coentrão, Casemiro, Gareth Bale, Keylor Navas, Marcelo, Luka Modric, Karim Benzema y otros tantos galácticos que conducía Zinedine Zidane. El ecuatoriano parecía que pronto iba a llegar al Real Madrid Castilla (filial). Tenía proyección. La prensa madrileña le seguía los pasos cuando este era más chico y proyectaban que podía ser un ‘nuevo’ Marcelo en el lateral izquierdo. Pero sus planes dieron un giro el verano del 2018, porque decidió fichar por el Swansea City (Gales), ilusionado con dar el salto al profesionalismo. Afincado este año en Estados Unidos por la propuesta del FC Cincinnati de hacerse un nombre en la MLS, el de Esmeraldas -criado en Madrid desde los tres años de edad- admitió el miércoles anterior en una entrevista con EL UNIVERSO que el defensa central español Jesús Vallejo trató de convencerlo de que se quedara en el Real Madrid. “Siempre me dijo que el Madrid es el mejor club del mundo y que como en Madrid no se iba a estar en ningún lado”.