Desde que Leonardo Campana se dio a conocer en el Campeonato Sudamericano Sub-20 que conquistó Ecuador y en el que fue el máximo anotador, ha vivido más decepciones que alegrías en sus primeros años como futbolista profesional. Llegó su fichaje por el Wolverhampton, donde no llegó a debutar, y dos cesiones en las que no consiguió demostrar sus habilidades. Sin embargo, en Inter Miami, en una ciudad que conoce bien, empieza a confirmar su categoría como delantero.