El primer plantel de Barcelona Sporting Club hizo público este miércoles un duro comunicado en el que denunció reiterados incumplimientos económicos por parte de la directiva y anunció medidas inmediatas que afectan directamente a la recta final de la temporada en la Liga Ecuabet.

Según detalla el documento, los jugadores arrastran cuatro meses de sueldos, primas y obligaciones impagos, una situación que no solo involucra al plantel profesional, sino también al personal que sostiene el funcionamiento diario del club, como cuerpo técnico, utileros, cuerpo médico y trabajadores administrativos.

El malestar se incrementó luego de que la fecha de pago fijada para el 15 de diciembre tampoco fuera cumplida, hecho que, según los futbolistas, terminó por quebrar la confianza mínima necesaria para trabajar en condiciones dignas.

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A esto se suma un punto aún más delicado: el club mantiene una deuda del 50 % del sueldo correspondiente a diciembre de 2024, es decir, una obligación pendiente desde hace un año.

Pese al escenario descrito, el plantel aseguró que continuó compitiendo con profesionalismo y compromiso, y destacó que varios jugadores incluso podrían haberse declarado libres por reglamento ante el incumplimiento contractual.

No obstante, afirmaron que se mantuvieron en cancha “por amor a los colores” y respeto a la hinchada.

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En el comunicado también se expresa el malestar por la ausencia de respuestas públicas de la directiva, a la que acusan de no “dar la cara” durante estos meses pese a la gravedad del conflicto.

Ante el reiterado incumplimiento, los jugadores informaron que han decidido no presentarse a los entrenamientos hasta que se regularicen los pagos pendientes y que, además, evalúan no disputar el último partido del campeonato ante Independiente del Valle, aunque reconocen la importancia deportiva del compromiso.

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Si los toreros ganan, clasificarán de forma directa a la fase de grupos de la Copa Libertadores, con lo que obtendrían ingresos de más de $ 4′000.000.

Finalmente, el plantel reiteró su compromiso con la institución y su hinchada, pero fue enfático al señalar que ningún profesional puede seguir trabajando sin recibir lo que por ley y contrato le corresponde.

En ese sentido, pidieron a la dirigencia actuar con responsabilidad y garantizar la estabilidad económica que, aseguran, merece todo el club.

Según el Código Disciplinario de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) si un equipo decide no presentarse a jugar un partido, se expone a una sanción que puede terminar con la pérdida de la categoría. (D)

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