Luciano Macías Argenzio debutó en Barcelona en noviembre de 1953, en un Clásico del Astillero, tenía apenas 18 años; compartió en su primer partido con muchos de sus ídolos, como Enrique Cantos, Sigifredo Chuchuca, José Vargas, Carlos Sánchez, César Solórzano, etcétera. Nadie podía imaginarse que ese jovencito, nacido en Ancón, con el tiempo se convertiría en el gran capitán del equipo torero. Es un ídolo por siempre y también es uno de los forjadores de la idolatría del BSC; Macías, reconocido por la afición como el Pollo, es el jugador que más años defendió a Barcelona en su historia. La última vez que se enfundó la camiseta amarilla fue en 1971. Ganó cinco de los torneos de Guayaquil y cuatro nacionales (1960, 1963, 1966 y 1970).