Luego de publicar un decreto que suspendía todas las competiciones de fútbol en Río de Janeiro, el alcalde de la ciudad, Marcelo Crivella, retrocedió este sábado y aplazó solo los partidos de Botafogo y Fluminense, dos equipos que habían cuestionado la reanudación del campeonato estatal esta semana en medio de la pandemia del coronavirus.