"En esa final (Milán 2016), el Real Madrid se puso 1-0 en la primera parte pero el gol fue en fuera de juego por muy poco. Nos dimos cuenta en el descanso. Era una acción difícil y mi asistente falló", admitió Mark Clattenburg, el árbitro inglés que condujo la final de la Liga de Campeones de 2016 en la que Atlético de Madrid no pudo tomarse revancha de la final de Lisboa 2014 con su vecino merengue.