El congreso extraordinario de la Federación Ecuatoriana de Fútbol quedó abierto para interpretaciones a favor y en contra de parte de dirigentes y allegados al balompié nacional, como el síndico de Macará, Orlando Salazar, quien calificó de “un corrupto tablero de ajedrez” a la reunión virtual del viernes, que terminó por ratificar en la presidencia de la Federación Ecuatoriana de Fútbol a Jaime Estrada, en reemplazo de Francisco Egas.