Antes del amistoso de esta noche ante Trinidad y Tobago, un ambiente “tenso” vivió la concentración de la selección ecuatoriana de fútbol. Un pedido de Delfín de recuperar a sus jugadores para disputar la final de vuelta de Copa Ecuador cambió el curso del trabajo en la Tricolor, que finalmente terminó por liberar a los seleccionados cetáceos y de Liga de Quito, que definen al campeón el sábado.