“Me temo que tenemos un complejo ante el Real Madrid”, se lamentó Beckenbauer en una entrevista concedida al sensacionalista diario Bild, de Berlín. El rezongo conllevaba, veladamente, un palo para los muchachos del Bayern Munich. “Nunca hubiera sido tan fácil vencerlos como esta ocasión. No estuvieron sobresalientes”, añadió con sutileza crítica. Los trató de blandos. Pero no es privativo del Bayern, todos los equipos europeos tienen ese trauma con el cuadro de Bernabéu. Siempre parece que se lo van a comer crudo y sin sal, luego lo tienen enfrente y se van reduciendo hasta verse pequeñitos. Por eso le resulta más sencillo una semifinal de Europa como visitante ante un grande de Alemania o Francia que un choque dominguero frente al Girona o el Betis. En España la vida es más dura. Los árbitros no, ellos son parejos, siempre tan gentiles en todo el continente. ¡Qué tíos tan macanudos…!