El Real Madrid perdía ante la Juventus 0-3 encaminando los cuartos de final de la Champions a la prórroga el pasado miércoles cuando un penal salvador en el descuento (90+8), anotado por Cristiano Ronaldo, puso el 4-3 global a favor de los merengues y su pase a las semifinales por octava vez consecutiva. Pero la sanción del árbitro inglés desató una polémica que ha dividido al planeta.