El cerebro controla todo el cuerpo. Lo hace a través de señales eléctricas que envía por medio de la columna vertebral y los nervios. Cuando una vértebra se desalinea, por estrés o un movimiento inadecuado, ejerce presión en la espina dorsal y se disminuye la capacidad que tiene el organismo para recibir mensajes, esto, para los quiroprácticos, da origen a las enfermedades.