“Se sufrió mucho, pero al final nos llevamos la satisfacción del triunfo”. Entre abrazos y felicitaciones esa fue la primera impresión de Jorge Marcillo, timonel de la yola de Asociación Deportiva Naval 1 (ADN), que ganó ayer la edición número 72 de la tradicional regata entre Guayaquil y Posorja.
“Nosotros siempre hemos sido protagonistas en esta competición, en los últimos años estuvimos cerca de ganarla y ahora por fin se nos dio el triunfo”, expresó Marcillo, que emocionado era saludado por docenas de familiares y amigos al arribar al malecón de Posorja.
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El timonel de ADN resaltó la labor de su equipo y consideró que la clave de la victoria estuvo en “mantener el ritmo”.
“Salimos últimos desde Guayaquil y, de a poco, fuimos superando a rivales complicados como las yolas de Andes y de Cocodrilos. Mantuvimos el ritmo y al final logramos imponernos”, comentó.
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Mientras, los integrantes de la yola de Andes no ocultaron su desilusión por no revalidar el título, que lograron en el 2010.
“Estuvimos entre los líderes, pero lamentablemente en los metros finales no pudimos mantener nuestro ritmo y ADN se adelantó”, explicó Carlos Gómez, primer remo del club.
A criterio del remero, la lucha por ganar la travesía estuvo muy reñida, por eso elogió a sus compañeros y también a los nuevos campeones.
reconocimiento al campeón
“ADN es un justo ganador. Estuvo mejor y eso hay que reconocerlo. Ellos manejaron bien los movimientos en la ruta y aprovecharon el estado de la marea y se quedaron con el primer lugar”, manifestó Gómez.
La jornada para los representantes de ADN fue memorable, porque otra de sus yolas, la segunda (compitieron con cuatro) fue tercera.
“Nos hubiera encantado llevarnos el segundo lugar, pero estamos contentos por la jornada que tuvimos. Dimos lo mejor y el tercer lugar nos llena de mucha emoción”, indicó Jimmy Sornoza, cuarto remo de la embarcación de ADN 2.
Sornoza se mostró agradecido de las personas que los aplaudieron y vitorearon al llegar a Posorja luego de la extenuante prueba. “Es muy lindo tener el apoyo de la gente, esto motiva a cualquiera. La prueba fue muy difícil y cada año se hace más exigente porque la preparación de los equipos es más intensa, nadie quiere perder”, concluyó el remero de ADN 2.
Cifras
18 EMBARCACIONES
Ese número de yolas fueron las que participaron ayer en la edición número 72 de la tradicional regata a remos Guayaquil-Posorja.
90 REMEROS
Cinco tripulantes integran cada una de las 18 yolas en la tradicional regata que cubre 56 millas náuticas (103 kilómetros).