Deportivo Quito no solo perdió (2-3) el duelo de anoche ante Imbabura, sino también la punta del campeonato (aunque ya había dejado de ser el líder tras la victoria de Emelec del pasado viernes sobre José Terán) y a dos jugadores por expulsión, Isaac Mina y Jairo Campos.
El partido tuvo mucha fricción desde su inicio, aunque el cuadro azulgrana se lanzó con ímpetu sobre el arco de los gardenios. Por eso el argentino Maximiliano Bevacqua marcó la ventaja a los 9 minutos.
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Pero en los minutos siguientes, el partido se emparejó en el marcador y en las sanciones de faltas. A los 21 minutos, Édison Vega ejecutó un remate de media distancia que vulneró al joven golero Adrián Bone y empató el encuentro.
Antes de culminar la primera etapa, Franklin Salas hizo magia y anotó el primero de sus dos tantos en el duelo de ayer. De manera soberbia cobró de derecha un tiro libre directo que superó la barrera chulla para desequilibrar el tanteador a favor del equipo local (40m).
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Sin embargo, el artillero puso en evidencia su condición de máximo artillero del campeonato y decretó la paridad del partido (2-2) en la segunda etapa del juego (59m).
No obstante, el Mago Salas mejoró su actuación en la noche y anotó sobre el final del partido (89m) con un cabezazo sin marca alguna un remate de esquina.
Con esta caída, los azulgranas son segundos del campeonato nacional con 24 puntos. Emelec es el líder con 27.