Una rana arborícola panameña, un roedor de Madagascar y dos lagartos encontrados solamente en Filipinas están entre 17.000 especies en peligro de extinción, dijo el martes un importante grupo ambientalista.

La rana arborícola de Rabb, descubierta apenas hace cuatro años, es uno de 1.895 anfibios que pronto pudieran desaparecer a causa de deforestación e infecciones, dijo la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

Publicidad

El grupo, basado en Suiza, estudió los casos de 47.677 animales y plantas para la Lista Roja de este año de especies en peligro, y determinó que 17.291 de ellos están en riesgo de extinción.

Más de uno de cada cinco mamíferos conocidos, más de la cuarta parte de los reptiles y 70% de las plantas están amenazados, dice el estudio, que agrega 2.800 nuevas especies al informe del 2008.

Publicidad

Estos resultados son apenas la punta del iceberg, dijo Craig Hilton-Taylor, que administra la lista. Agregó que muchas más especies aún no han sido evaluadas y pudieran estar también en peligro.

El único nuevo mamífero en la lista es el voalavo oriental (Gymnuromys roberti), un roedor que vive en las selvas montañosas en Madagascar. La UICN lo clasificó de  amenazado -a dos pasos de su extinción- porque su hábitat está siendo destruido por la deforestación.

La Lista Roja incluye ya a especies como el tigre, de los que se piensa que existen solamente 3.200 en las selvas y cuyo hábitat en Asia sigue reduciéndose por la presencia humana. Gobiernos y organismos internacionales de conservación usan la lista como guía para decidir cuáles especies son colocadas bajo protección legal.

El grupo añadió casi 300 reptiles este año, incluyendo el lagarto varano de la isla de Panay y el hidrosaurio crestado filipino, ambos cazados como alimentos y amenazados por la tala de árboles en Filipinas.

La UICN examinó además 33.120 peces de agua dulce, 510 especies más que el año pasado, y encontró que 1.147 de ellas estaban amenazadas de extinción.

Algunas especies se han recuperado gracias a esfuerzos de conservación, dijo el grupo. Pero para muchas otras especies, los esfuerzos muy probablemente llegarán muy tarde.