El estadio Gigante de Arroyito de Rosario Central con capacidad para más de 41 mil espectadores, que acaba de ser habilitado por la FIFA, quedó en las puertas de albergar el choque entre Argentina y Brasil el 5 de septiembre por las eliminatorias mundialistas, según lo dio a entender este martes el mandamás del balompié nacional.
La decisión estará en manos del cuerpo técnico, lo importante es que estén conformes lo que jueguen, declaró el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Julio Grondona.
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Al darle poder de decisión al técnico Diego Maradona y al plantel, quedó en claro que la ciudad de Rosario, a unos 300 kilómetros al norte, sería escenario de ese duelo entre argentinos y brasileños, acérrimos enemigos.
Tanto Maradona como los principales referentes del equipo, entre ellos Lionel Messi y Javier Mascherano, pidieron jugar en el estadio Gigante de Arroyito de Central, y no en el Monumental de River Plate, en la capital argentina.
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La razón que esgrimieron es que el Monumental no tiene en buen estado a su campo de juego y que además el público está lejos de la cancha y el aliento casi no se hace sentir.
Querés que te diga mi opinión?, le dijo Grondona al diario deportivo Olé. A mí me da exactamente lo mismo una cancha u otra.
Ayer, la AFA informó que la FIFA autorizó el estadio de Central como sede alternativa para los futuros encuentros de la selección de Argentina por las eliminatorias mundialistas.
Además de recibir a Brasil, los Albicelestes harán lo propio con Perú, el 10 de octubre. Serán visitantes el 8 de setiembre con Paraguay y el 13 de octubre con Uruguay, en la última fecha.
Argentina está al borde del repechaje ya que marcha en el cuarto lugar con 22 puntos, seguida por Ecuador con 20 y Uruguay con 18. Brasil lidera la tabla con 27, uno más que Chile y dos más que Paraguay.
El quinto de estas eliminatorias se jugará el viaje a Sudáfrica en un repechaje contra el cuarto de la Concacaf.