La armonía que por 21 años se mantuvo entre Moconsa, administradora del estadio Monumental, y las dirigencias que han asumido Barcelona desde esa época, se rompió.
El pasado 25 de febrero, Eduardo Maruri, presidente torero, se quejó de la gestión de Moconsa y ratificó el interés de asumir el control de la sede, que desde su fundación en 1987 es manejada por Moconsa (por plazo indefinido), según el convenio establecido por la constructora y el club.
Publicidad
“Queremos dejar sentada nuestra insatisfacción de cómo Moconsa está manejando el estadio. Es ineficiente”, expresó.
Según el dirigente, el año pasado el club pagó $ 500.000 en arreglos de todo tipo. Y puntualizó que “los ingresos por los pagos de los propietarios de suites y palcos no llegan al club. El diálogo sigue abierto, pero vamos hacia la recuperación de la administración del estadio”.
Publicidad
Pero Víctor Hugo Sicouret, vicepresidente de Moconsa, defiende la administración: “Barcelona quiere asumirla y lo han pedido a través de Nicolás Parducci (de la comisión de estadio). Hemos invitado al señor Maruri, con una carta firmada por el ingeniero Alfredo Gregor y yo, como presidente y vicepresidente de Moconsa, y contesta con un rueda de prensa diciendo que está mal administrado, que el césped deja mucho que desear, que hay luminarias con problemas, que han tenido que invertir dinero en comprar luminarias, pero eso es falso”.
“Las luminarias fueron compradas por Moconsa a $ 30 mil. También dicen que el edificio fue pintado por Barcelona, eso es mentira. Hicieron un trueque de publicidad con pinturas Cóndor, luego Barcelona le vendió a Moconsa la pintura y gastamos $ 29 mil en esa compra y encima dimos la mano de obra”, asegura Sicouret.
Además dice, “no es posible que Maruri diga que quiere recuperar la administración, eso es no saber la historia. Jamás la tuvo. Al crearlo se estableció que no había que entregarle la administración a las directivas, porque estas cambian”.
Disputa por ingresos
Moconsa recauda los pagos de los propietarios de 782 suites y 4.624 palcos, que representan el 30,86% del aforo total (75 mil personas). Los dueños de suites pagan $ 45 al mes y los de palco $ 15 trimestrales.
El resto de la taquilla la capta Barcelona, ya que al club le pertenece -pero no administra- lo que se denomina alícuota A1, que incluye las generales, tribunas, preferencias, 5.358 palcos, camerinos y cancha principal.
Pero Sicouret aclara que “con el manejo del 30,86% de ingresos, por las alícuotas de los condóminos, se mantiene 100% del estadio. Barcelona no gasta ni un centavo. Y a pesar de todo tenemos que mantener la cancha principal y alternas como indique el DT Benito Floro”.
“Tenemos un presupuesto de $ 530 mil al año, pero gastamos más, porque la gente se atrasa. Tiene que cumplirse la ecuación: el equipo gana, la gente paga. Pero como al equipo le va mal, los condóminos no están al día”, aclara Sicouret.
El empresario sostiene que la dirigencia actual podrá apoderarse del estadio si respeta los estatutos y reglamentos que solo la asamblea de condóminos puede modificar; o si se cumple la cláusula de la venta de la totalidad de suites y palcos a cargo de Moconsa. “El porcentaje que falta es pequeño. Le digo a Maruri que se tranquilice, que espere un poco, que ya mismo terminamos de vender”.
Un fideicomiso
Pero la dirigencia canaria no quiere esperar. Así lo advierte Jimmy Murillo, gerente general del club, quien manifiesta que el consejo de condóminos es la autoridad máxima del edificio. “Y a través de ellos haremos los cambios (del estatuto) necesarios para tomar la administración”, recalca.
Y manifiesta que “se analiza la figura de un fideicomiso para que se proteja y se controle el uso de los fondos de las alícuotas para hacer las mejoras que necesita el estadio”.
Acota que el fideicomiso sería autónomo en el flujo de fondos, pero las acciones a favor del estadio las tomaría el club. El objetivo es controlar todo el estadio antes del final del año.
Antecedentes
EL MONUMENTAL
Escritura de compra-venta Bajo la figura de compra-venta de terreno con hipoteca, la Junta de Beneficencia entrega 17 hectáreas a Barcelona, cuyo presidente era Isidro Romero, el 25 de noviembre de 1985.
Escritura de permuta
El 26 de noviembre de 1985, se firma una permuta entre Barcelona (suscrito por Romero) y Compañía General (de Alfredo Gregor) para la entrega del terreno a cambio de la construcción del estadio.
Inauguración
El 27 de diciembre de 1987 se inaugura el Monumental con una capacidad para 50.000 espectadores (foto).
Para unas 75 mil personas
En julio de 1993, el estadio es ampliado con un nuevo edificio de suites de cuatro pisos y dos bandejas para generales.
Eduardo Maruri
PRESIDENTE DE BARCELONA
“Los ingresos que recibe Moconsa no se están invirtiendo en obras. Es una estructura ineficiente”.
Víctor Hugo Sicouret
VICEPRESIDENTE DE MOCONSA
“Barcelona no gasta en mantenimiento. Nuestro personal está afiliado al IESS. Está al día. No tenemos demandas”.