Liga Deportiva Universitaria de Quito, finalista del Mundial de Clubes (mide hoy en Japón, a las 05:30 de Ecuador, al Manchester United), vive su era futbolística e institucional más gloriosa en sus 78 años de vida. En una década los albos se han consolidado como el mejor equipo del fútbol ecuatoriano.

En las últimas diez temporadas los blancos se quedaron con cinco de los doce torneos disputados (entre 1998 y el 2008 se jugaron ese número de certámenes porque el 2005 se dividió en Apertura y Clausura).

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El dominio universitario es contundente en esas once campañas. Ni siquiera su descenso a la Serie B, en el 2000, frenó a Liga, que retornó de inmediato a primera categoría (2001). Sus cinco coronas están lejos de las dos obtenidas, en ese mismo lapso, por Emelec (2001 y 2002) y el Nacional (Clausura 2005 y 2006), Olmedo (2000), Deportivo Cuenca (2004) y Deportivo Quito (2008).

En esta década de gloria, además de no tener rivales en Ecuador que puedan seguir su ritmo arrollador, en cuanto a dar vueltas olímpicas, los azucenas dividieron la historia de clubes ecuatorianos, a nivel internacional, en antes y después de dos brillantes gestas, una en Brasil, la otra en Japón.

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Luego de 48 años de ver, a la distancia, cómo casi todos los equipos de países de Sudamérica (excepto Venezuela y Bolivia) conquistaban la Copa Libertadores, Liga de Quito conmocionó a Ecuador con una hazaña en el estadio Maracaná.

El pasado 2 de julio, en una dramática definición por penales, los dirigidos por Edgardo Bauza sometieron a Fluminense y obtuvieron el primer título copero para un club tricolor.

Ese capítulo inolvidable, épico, llevó más lejos de lo soñado a los albos. Su nombre, que se agigantó continentalmente, se pronuncia con más fuerza en el planeta: en Japón se convirtió en el primer cuadro nacional en jugar, y ser finalista, del Mundial de Clubes de la FIFA.

La brillantez de los éxitos nacionales e internaciones de Liga se respaldan en sólidas bases institucionales, cuyos pilares se colocaron el 5 de marzo de 1997 cuando inauguraron su propio estadio, la Casa Blanca.

El patriarca de esta dinastía de vencedores es Rodrigo Paz, símbolo y máximo dirigente albo. “Esto (llegar a la final del Mundial de Clubes) es el resultado de un arduo trabajo de muchos años”, indica el Negro Paz, que aún desea más prestigio, fama y títulos para Liga: “No podemos decir que ya hemos llegado, que esta es una institución perfecta. Lucharemos por mejorar cada vez más”.

Incorporar más socios, construir un complejo para las divisiones menores, impulsar nexos con Manabí, Esmeraldas e Imbabura para crear en esas provincias escuelas de fútbol y desarrollar agresivos programas de mercadotecnia son varias de las metas de la dirigencia, que como dice Paz tiene la idea de “mantener al club en la élite del deporte mundial”.

Liga, entre 1998 y el 2008, dejó de ser solo de Quito. Rebasó fronteras. En julio pasado se transformó en Liga de América. Ahora es Liga del mundo.

Cifras

440
Juegos. Entre 1998 y el 2008 Liga realizó ese número de partidos en la Serie A del torneo ecuatoriano.

211
Triunfos. Los albos vencieron en esa cantidad de ocasiones.

98
Empates. En diez años Liga igualó ese número de juegos por el campeonato nacional.

131
Derrotas. Los azucenas perdieron apenas el 29,77% de sus compromisos.

9
Títulos. Conquistó los campeonatos en 1969, 1974, 1975, 1990, 1998, 1999, 2003, Apertura 2005 y 2007.

55,38%
Efectividad. Es el club con mejor promedio en 10 años.

5
DT. Ese número de técnicos le dieron a Liga sus últimos cinco títulos ecuatorianos: Paulo Massa (Brasil), Manuel Pellegrini (Chile), Jorge Fosatti (Uruguay), Juan Carlos Oblitas (Perú) y Edgardo Bauza (Argentina).