El Osasuna puso el jueves un pie en la final de la Copa de la UEFA tras ganar 1 a 0 al Sevilla en el partido de ida de las semifinales de la Copa de la UEFA disputado en el estadio Reyno de Navarra de Pamplona (norte), con un tanto de Roberto Soldado.
  
Soldado, que no podrá jugar el partido de vuelta por acumulación de tarjetas amarillas, aprovechó un saque de falta para cabecear el balón a la red (55) en un partido que incluso vio la sustitución del árbitro holandés Eric Braamhaar, lesionado con una rotura fibrilar en el gemelo de la pierna izquierda.
  
Los dos equipos comenzaron el encuentro con mucha cautela, tanteándose el uno al otro, con lo que el juego se desarrollaba en el centro del campo sin apenas llegadas a las porterías, aunque el Sevilla, vigente campeón de la UEFA, parecía llevar más peligro.
  
Las jugadas por la banda derecha trenzadas por el centrocampista Jesús Navas y el brasileño Luis Fabiano, traían de cabeza a la defensa del Osasuna, que busca meterse en su primera final europea de la historia.
  
El franco-maliense Frederic Kanouté, mejor goleador de la Liga, junto con el argentino Diego Milito, metió el susto en el cuerpo a los osasunistas en una de sus escasas apariciones con una gran volea tras un pase del brasileño Dani Alves desde la derecha, que se fue alto por poco (12).  
  
El Osasuna por su parte recurría a las salidas del lateral izquierdo  Enrique Corrales buscando a Patxi Puñal y Raúl García, muy activos un poco por detrás de los delanteros Roberto Soldado y Savo Milosevic.
  
Puñal puso en aprietos al portero Cobeño en el minuto 15 al rematar en carrera en la frontal del área un pase de David López que se fue fuera y en el  27 fue su compañero Raúl García quien soltó un zurdazo que se fue rozando el palo izquierdo de David Cobeño.
  
Los últimos minutos de la primera parte fueron de dominio del Osasuna, lo que llevó al entrenador del Sevilla, Juande Ramos, a dar entrada en la segunda parte al ruso Alexander Kerzhakov por Luis Fabiano buscando mayor ataque.
  
Sin embargo, el gol llegó para el Osasuna en el minuto 55 cuando el ex madridista Roberto Soldado remató de cabeza, cruzado, a la escuadra derecha de la portería sevillista una falta botada por David López.
  
El 1-0 obligó al Sevilla a abrir sus líneas conscientes de la importancia de lograr el empate y, de paso, un gol en campo contrario, pero no lograba  llevar auténtico peligro a la portería del portugués Ricardo.
  
Una de las grandes oportunidades fue para Kanouté, muy apagado durante todo  el partido, al que el defensa osasunista Carlos Cuéllar le sacó el balón cuando se aprestaba a rematar un pase de Dani Alves (78), quien volvió a colocar un buen centro al vértice del área pequeña, aunque el remate de Kerzhakov se fue alto (90).
  
El Sevilla lo intentó en los últimos minutos del partido, pero finalmente el Osasuna se llevó una victoria que le permite soñar con su primera final  europea, a la espera de lo que pueda ocurrir en el partido de vuelta el próximo 3 de mayo en Sevilla.