En esta misma sección de este prestigioso Diario he escrito por más de una ocasión sobre la necesidad de tener alumbrado público en las noches en las distintas vías, pero esta situación no se resuelve.
Puedo comprobar a diario que persiste la ausencia de alumbrado en sectores específicos tales como en el desvío de la avenida del Bombero y Carlos Julio Arosemena; el paso elevado de la Carlos Julio Arosemena, a nivel de la ciudadela Miraflores y de la gasolinera Petrolríos; y a la entrada de la ciudadela Ferroviaria a nivel del malecón del Salado y del Guayaquil Tenis Club.
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Realmente esto es un peligro para el tránsito durante la noche y la madrugada. Es una pena que no se pueda solucionar esa deficiencia de los servicios básicos de nuestra ciudad, lo que puede ocasionar accidentes de tránsito a quienes salimos a trabajar desde tempranas horas de la mañana. (O)
Consuelo Franco Saa, médico, Guayaquil