Entre los problemas que tiene nuestra bella ciudad de Guayaquil, desde hace un tiempo tenemos el incremento exagerado de tricimotos y motos eléctricas.

Sobre aceras, sin luces en calles de alto tráfico y ausencia de casco: estas son algunas de las faltas de conductores que circulan en motos eléctricas y ‘scooters’ por distintos sectores de Guayaquil

Considero que todas, o por lo menos la mayoría, incumplen normas de tránsito y hasta la cantidad de pasajeros permitida para la que fueron diseñadas.

Publicidad

Los peatones y conductores de autos nos vemos en el arduo dilema de acertar cuál será el accionar de los conductores de estos medios de transporte. Por ejemplo, para qué lado irán, si respetarán las señales de tránsito, o si tratarán de rebasar por un espacio angosto.

He visto como en varias situaciones hacen caso omiso a discos pare y a la luz roja de los semáforos y como agentes de tránsito no les llaman la atención. Adicionalmente, varias motocicletas, por lo que he visto, ni siquiera cuentan con placas o algún identificador de tránsito.

Publicidad

¿Qué esperan las autoridades para frenar esto? ¿Acaso están esperando que ocurran accidentes en que se pierdan vidas o donde haya pérdidas materiales?

La ley debe ser para todos. Salir con un medio de transporte de la forma en que lo hacen estas personas debería ser considerado ilegal.

Ya es hora de que la Alcaldía de Guayaquil y la Agencia de Tránsito Municipal hagan cumplir la ley y se preocupen por el bienestar de los ciudadanos. (O)

Rina Buri García, ingeniera civil, Guayaquil