Llegó fin de año, pero, ¿realmente estamos preparados? Hoy te lanzo unas preguntas. Ahí vamos. No lo pienses demasiado. Comienza siendo breve y conciso. Empezamos:
¿Te ha sido complicado este año? ¿Cómo transcurrieron estos meses?
Deduzco que vamos bien, entonces sigamos: ¿has causado algún daño?; ¿dejaste ir lo que no te pertenece?; ¿decidiste quién era la persona que debía estar ahí?; ¿lograste todo lo propuesto estos meses?; ¿piensas que ocultar la verdad valió la pena?; ¿se te ocurrió hacer una buena acción antes de que acabara el año 2024?
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Espero que tus respuestas sean honestas, sigamos: ¿tienes el valor de ver cómo has cambiado estos meses?; ¿has mentido por una buena causa?; ¿amaste a alguien con todas tus fuerzas?; ¿perdiste algo?; ¿te rompiste en pedazos por dolor?; ¿has brindado ayuda en algún momento?; ¿fuiste sincero cuando alguien ha pedido tu opinión?; ¿has llorado y reído durante estos doce meses?; ¿abrazaste con todas tus fuerzas como si no hubiese un mañana?; ¿diste ese último beso?; ¿te has peleado?; ¿cuántas veces has juzgado sin saber el motivo?
Llegados a este punto, creo que sabes todo lo que has respondido en cada interrogante y si te sientes orgulloso de tus acciones. Cierto que el tiempo se esfuma, las horas se van difuminando entre tus manos, los minutos y segundos del 2024 expiraron en un abrir y cerrar de ojos, dando paso al 2025 y dejando atrás todo lo acontecido. Un año cargado de momentos malos, buenos, complicados, pérdidas que no estaban programadas y que ha tocado aprender a digerir, ya que el destino juega a su libre albedrío.
Como colofón solo puedo decir que si hoy no te sientes orgulloso de tus acciones, siempre queda tiempo de cambiar, nada es imposible, cuando se tiene ganas y fuerzas para hacerlo a lo largo de este año nuevo que nace en breve. (O)
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Alexia Rodríguez Pequeño, Vigo, España
