Es increíble la cantidad de partidos políticos que hay en nuestro pequeño país de 18 millones de habitantes, cuya tercera parte no puede votar por cualquier situación, es lo que nos va degradando políticamente. El populismo ha sido también otro enemigo, comenzando con Abdalá Bucaram, quien con su palabra y su don de mando creó la burocracia dorada, supuestamente iba a sacar al Ecuador de la pobreza, en ese entonces manejó al Congreso como él quiso. Luego nos gobernó un personaje joven, inteligente y carismático, sabiendo manejar las masas y todos quienes creíamos en él votamos por él, qué dolor, convirtió a su gobierno en el más nefasto de la historia de nuestro país, se burló de la democracia y de la Constitución, manejando las cinco funciones del Estado porque decía: “El Estado soy yo”, como lo dijo el rey francés Luis XIV. Lenin Moreno, su sucesor, continuó gobernando con los correístas porque no tenía otra opción. Tras cuatro años Moreno le entregó el poder a Guillermo Lasso, elegido en las urnas, pero tildado de burócrata, consiguió enemigos en la Asamblea lo que terminó en una “muerte cruzada”, y acá es adonde quería llegar, la propuesta esperanzadora de él de disminuir la cantidad de legisladores se quedó en nada.

Asamblea Nacional: ¿Valió la pena?

Con mucha decepción debo hablar del Gobierno actual con: inestabilidad de ministros, enemigo de los dos grupos de legisladores más grande que tiene la Asamblea, y salvando la patria a punta de estados de excepción. Le pido que aproveche su juventud y su inteligencia durante lo que le queda de gobierno, presidente Daniel Noboa. (O)

Luis Mario Contreras Morales, Quito